Ravenna: The Mosaics Strike Back

A ver, para este día había opciones en plan ir a algún pueblo cercano, ir a Bolonia, dar paseos... Todo se quedó un poco en el aire hasta que nos levantásemos, la idea era ir tranquilos sin horas y tal. Spoiler alert, al final fuimos con horas.

No sé muy bien a qué hora se levantó Pablo, se supone que pronto para hacer lo de las fotos del post anterior, pero no engaña a nadie porque el ruido de la puerta al salir de la habitación es lo que me despertó y eran las 10, que para él es tarde.

[Nota de Pablo] Pablo "el engañador de las bellas durmientes"

En fin, que tranquilamente nos fuimos a desayunar a una pastelería con unos dulces estupendos con todo su azúcar y mantequilla (esto es relevante porque la noche anterior habíamos ido a cenar a un sitio en el que nos pusieron un postre vegano y aunque estaba bueno, todo con mantequilla sabe mucho mejor) y a hacer el plan. Lo de Bolonia era una pereza total de una hora de tren y puf, pues mejor no y lo de los pueblos sin coche es impensable, así que pensamos que una buena opción era revisitar el Mausoleo de Galla Placidia y la Basilica de San Vitale, como bonus pensamos que sería una buena idea ir a otro monumento patrimonio de la humanidad para el que hay que coger un autobús urbano.

Nos fuimos paseando hasta el Mausoleo y la Basílica, que están en el mismo recinto, y al ver la cola decidimos dejarlos para la hora de la comida, pensando que habría menos gente. Seguimos paseando y se nos puso a llover, así que nos refugiamos en una librería en la que Pablo se puso su gorra de fanboy tolkieniano y se dedicó a hacer fotos de los libros de Tolkien que tenían allí y a spamear el whatsapp de la Sociedad Tolkien Española.
Al final decidimos comprarnos un paraguas para asegurar que no vuelve a llover el resto del viaje.

[Nota de Pablo] Dos cosas me parecieron curiosas en esta librería de la cadena Giurno. Una, sus Atlas Scientifici, libretos científicos temáticos hipercondensados sobre genética, física, geometría, botánica o anatomía. Qué maravilla de colección. Llegué a pensar en comprar el de botánica pero pensé que se me haría muy pesado y lento de leer en italiano. Y lo otro fue ver colaboraciones potentes tanto de la Sociedad Tolkien Italiana como la Asociación italiana de estudios tolkienianos con la edición de varios volúmenes sobre Tolkien.

La colección de libretos científicos

El ejemplar sobre física, realmente completo a pesar de su tamaño. ¡Trágate esa Tipler!

Un diccionario a cargo de la STI, mola.

Una obra con la colaboración de la AIST

De vuelta a la cola nos dimos cuenta de que las entradas se podían comprar online. Al mirar la web nos dimos la primera sorpresa: las entradas van con hora. LMAO. Resumiendo, que pillamos entradas para las 18:00 y las 18:30 para los dos sitios que queríamos ver, así que ya íbamos con hora. Una nota importante es que las entradas se venden en pack para tres o cinco monumentos, no se pueden elegir son tres determinados o cinco determinados (los cinco que vimos con la guía el día anterior, ¡sorpresa!). En total la entrada para los cinco son 12.50€, así que a nosotros nos pareció aceptable aunque sólo fuésemos a ver dos.

Con tiempo por delante pensamos en ocupar el rato yendo al monumento a distacia de autobús que además este fin de semana sólo abría el domingo desde las 13:30. Compramos los billetes del bus en la oficina de turismo y nos dieron un horario ya que el bus en cuestión tiene una frecuencia de una hora en festivo, ains. Dato gracioso es que en el bus no se puede picar el billete, no sé si por algo relacionado con el covid o qué, porque la máquina estar está, el protocolo es que te subes y con un boli escribes en el billete el día y la hora y listo O_o

El monumento del bus es la Basilica di Sant'Apollinare in Classe y, como ya se estará imaginando todo el mundo, también tiene mosaicos para ver, fundamentalmente en el ábside, que está todo recubierto de mosaicos. En este caso el tema central es el santo al que está dedicada la iglesia, que se representa bajo una cruz enorme rodeado de ovejas que representan a los apóstoles, todo muy bucólico y con muchos verdes. Una vez más es un sitio muy bonito y los mosaicos merecen muchísimo la pena.

Vista general del ábside y la nave central

Detalle de los mosaicos. Tenemos profetas, la cruz, corderos, al santo, etc. Parece ridículo decirlo a estas alturas pero NO son pintura, son mosaicos gigantescos con teselas muy pequeñas.

Según parece los de esta basílica tuvieron una pelotera con los de la basílica del día anterior (la Nuovo) porque los Nuovos se inventaron que los huesos del santo estaban allí para que los peregrinos fueran a visitarles y se dejaran los dineros, juas, ¿dónde habré escuchado yo esta historia antes? En fin, que al final un mandado del Papa aclaró la cosa y los Nuovos tuvieron que dejar de contar trolas. La gracias es que unos siglos después los huesos acabaron trasladándose allí o eso creemos. En esta basílica sí que está muy marcado con un altar en el centro el lugar donde el santo fue martirizado.

Interesantes también los sepulcros. Unos ocho o así, en ambas naves laterales. La gracia es que se corresponden con siglos V-VII y tienen gustos romanos y bizantinos. Los romanos son más plásticos y figurativos y los bizantinos más sobrios y abstractos. El de la foto tiene pinta de ser romano.

Por allí no había mucho más que hacer, hay un museo de la ciudad pero no teníamos mucha gana de museo, así que nos cogimos el bus de vuelta y nos tomamos un tentenpié en forma de unas piadinas (que son como unos bocadillos con pan de burrito gordito) de embutido en un mercado muy pijo que hay en el centro y nos dimos una vuelta más para hacer tiempo hasta las 18.

De la visita segunda al mausoleo y San Vitale poco más se puede decir, tanto nos gustaron que volvimos a por segundos, así que lo mejor es que hable la segunda tanda de fotos (que dice Pablo que le han quedado más artísticas) que tenemos.

Detalle de mosaico azul estrellado, símbolo de la divinidad. Más tarde la divinidad se giró hacia el dorado pero durante un tiempo el azul oscuro era el color asociado a ella.

Vista hacia arriba tratando de cubrir la bóveda central y varios ábsides. Se ve una de las piedras de alabastro con la luz vespertina haciendo un juego fabuloso, como de fuego. Los mosaicos que recorren las columnas y los arcos parecen casi alfombras que tapizan la piedra.

Una maravilla de mosaico. Estos dos animales representaban dos de los apóstoles

En el ábside central se ve este mosaico de San Lorenzo yendo casi hasta con ganas a la parrilla de su martirio. Es una escena hipnótica a lo que ayuda el cielo estrellado que lo rodea

Ya en la Basílica, foto del bóveda central de estilo barroco. Se pueden disfrutar los juegos de perspectivas que parecen dotarla de una tercera dimensión con las colgaduras.

Pero claro, luego están los mosaicos del ábside y se te olvida la bóveda barroca.

Jesucristo que preside el arco principal, parece aquí con barba y con el anillo arcoiris que lo circunda, más bien tu amigo jamaicano

De nuevo, todo esto en una basílica de ladrillo que por fuera no te hace sospechar nada

[Nota de Pablo] Una cosa que nos sorprendió en esta segunda visita al mausoleo, es que habia gente que entraba, hacia tres fotos y se iba. ¿Pero están cegatos? ¿No ven lo que tienen delante? Olvida el tema religioso, olvida que es patrimonio mundial, un sitio así te sobrecoge. Yo pensé que habíamos estado 3 minutos y Angela, que lo había cronometrado porque la visita va por tiempo, me dijo que habían sido 10 minutos. En ese lugar el tiempo trascurre a otra velocidad.

Mañana nos ponemos en camino a la Toscana, a lo que se tercie y a ver Florencia y Monteriggioni de nuevo.