Ésta es la pregunta más compleja del desafío hasta ahora. En este momento están ocurriendo tantos cambios en el ámbito de mi vida dedicado a los juegos de rol que realmente me es muy difícil aventurar un futuro a diez años.
Si me centrase en el apartado de jugar, diría que me veo como ahora. Si bien los últimos diez años sí que han representado algún cambio por el mero hecho de haber dejado atrás la vida de estudiante y pasar a la vida laboral y a la reducción de tiempo que eso supone, no veo que los próximos diez años vayan a suponer un cambio semejante. Si está en mi mano, seguiré jugando todo lo que pueda, con mi grupo de siempre y en las jornadas o eventos a los que pueda ir. Al fin y al cabo, los juegos de rol han formado parte de mi ocio los últimos veinte años y no veo por qué es algo que debiera cambiar. Al igual que me encantan el cine, leer, o los videojuegos y sigo disfrutando de todos ellos asiduamente, no encuentro motivo para abandonar otra de mis aficiones.
En lo que respecta al efecto de los juegos de rol en otros ámbitos de mi vida, no estoy muy segura. Tras embarcarnos en la aventura que ha supuesto Extra-Dimensional Publishing y el éxito del Kickstarter de Aventuras en La Marca del Este, ¿quién sabe las posibilidades que se pueden estar abriendo en otras direcciones? ¿Tal vez un futuro en el que se combine una faceta más profesional con la de jugadora? Habrá que esperar y ver, pero si una cosa es segura, es que quiero y veo rol en mi futuro en diez, veinte o treinta años.
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