The Black Magician Trilogy

Hace poco terminé de leer The Black Magician Trilogy.  Empecé hace cosa de un año y, aunque el primer libro me pareció lo  suficientemente interesante como para hacerme con los otros dos, no ha  sido hasta hace poco que por fin me he decidido a terminarla dentro de  mi nuevo plan para terminar todas las series que tengo empezadas.


En primer lugar, he de decir que no es una trilogía que vaya a  cambiar nada, no es magnífica ni fuera de lo común. Sin embargo es  entretenida y, aunque bastante previsible, tiene algunos giros  inesperados que añaden mucha tensión a la historia y contribuyen a  mantener el interés.

Aviso que puede haber algunos spoilers a continuación.

Los protagonistas de la historia van cambiando de libro en libro. Si  bien la mayoría de ellos están presentes en los tres, su importancia en  la historia y su contribución a la misma varían bastante. La única  constante es Sonea, la protagonista principal. Sonea es una chica de los  barrios bajos que descubre accidentalmente que posee poder mágico, un  gran poder mágico. Durante el primer libro, la histora se centra en la  búsqueda que emprende The Magicians’ Guild para encontrarla y  sus esfuerzos por esconderse. No tengo un recuerdo muy fresco de este  libro pero me entretuvo bastante y Sonea, a pesar de no ser un personaje  demasiado fuerte, no supuso una gran rémora a la hora de continuar con  los siguientes. Ciertamente, el final de este libro plantea suficientes  incógnitas, especialmente en lo que se refiere al misterioso Akkarin, High Lord del gremio, como para despertar la curiosidad sobre cómo terminará la historia.

Como en toda trilogía que se precie, el segundo libro suele ser el más flojo. The Novice representa un enlace correcto entre el primero y el segundo dejando las  semillas para el desenlace plantadas. La segunda parte comprende  fundamentalmente la vida “escolar” de Sonea y es una mezcla de Harry  Potter siendo perseguido por un Draco Malfoy con muchísimo tiempo libre,  aunque he echado en falta un poco más de Harry en la huidiza Sonea (a  veces hay que que responder o nadie te respeta, chica). Lo más  interesante del libro, sin embargo, es la importancia que va cobrando  Akkarin a medida que se van desvelando detalles de su personalidad y de  sus secretos.

No puedo negar que desde el principio del segundo libro sabía lo que  iba a pasar al final del tercero y por qué derroteros iba a tirar la  historia. A pesar de ello la saga está escrita con habilidad suficiente  como para que esto a mí no me supusiera un problema y mi interés se  mantuviera intacto, especialmente cuando en The High Lord  ocurren ciertos eventos inesperados que dotan a Sonea de mayor atractivo  como personaje. No quiero contar mucho del libro, porque ya he hecho  algún pequeñísimo spoiler, así que diré que es un buen libro final y que  si el primero resulta lo suficientemente interesante como para ir a por  el segundo, ciertamente merece la pena no quedarse sin leer el tercero.  Mi única queja con respecto a éste es el remate de la historia, no los  hechos en sí, que como ya he dicho me los veía venir, sino al clímax.  Después de tres libros y más de quinientas páginas por libro una sólo  pide que ese momento dure algo más de una página. Sabe a poco y queda,  para mi gusto algo precipitado y falto de una pizca de épica.

En líneas generales, he disfrutado con la lectura de esta trilogía,  hubiera deseado una protagonista más enérgica y un final más largo, pero  ha sido una lectura satisfactoria y, por el momento, no creo que me  deshaga de estos libros por si me apetece volver a leer sobre Akkarin en  el futuro ?

Disculpas por el vocabulario en inglés, he leído la edición original y  como no sé cómo han sido traducidos muchos términos prefiero dejarlos  en versión original. Creo que en España se ha publicado como Crónicas del Mago Negro.