Smoky Mountains, primera parte
La pequeña parada en Atlanta sólo ha sido una pequeña toma de contacto. El viaje realmente ha empezado en North Carolina -me encanta como lo pronuncian-, en las Smoky Mountains. El nombre viene de la denominación que los Cherokee les daban, algo así como montañas del humo azul. Por cierto que los Cherokee siguen viviendo por aquí pero en una reserva. Estos son los famosos Cherokee del Trail of Tears. Pero de esto mañana más, cuando volvamos de la visita a la reserva.
Ayer llegamos a la pequeña ciudad de Bryson, en inglés Bryson City, aunque es más acertado llamarlo pueblo, porque no es mucho más. Si habéis visto los pueblos de la películas americanas, Bryson es exactamente eso. Casas bajitas y una calle principal con la mayor parte de los comercios. A mí me llama la atención la poca gente que se ve caminado por las calles considerando el tamaño del pueblo. Imagino que todas las casas dispersas por todas las carreteras del condado hacen que el desplazamiento en coche sea indispensable.
El pueblo está rodeado de montañas y, como dice el cartel a la entrada, es The Gateway to the Smoky Mountains, la puerta a las Smoky Mountains. Este pueblo es una base de operaciones excelente para poder acceder a una gran cantidad de actividades y lugares interesantes en la región. Importantísimo mencionar la inestimable ayuda de la encargada de la Cámara de Comercio (Chamber of Commerce) que nos dio una increíble cantidad de recomendaciones utilísimas y nos mandó a cenar a un lugar encantador. Lo sé, todos tenemos esa duda existencial sobre lo que se puede comer en este país. El que se piense que aquí no se puede conseguir un buen plato de comida casera está bien equivocado, esto no es Inglaterra ? Como decía, siguiendo el buen consejo de esa mujer, fuimos al restaunrante de la posada Frymont Inn a comer una deliciosa crema de brocoli y una trucha muy maja, un éxito; y el servicio espléndido, como suele ser norma en este país.
Hoy hemos tenido un día completito. Por la mañana hemos hecho un tour en tren por las montañas que nos ha dado una visión más amplia de la región muy difícil de lograr por otro medio. Por la tarde hemos ido a hacer tirolina, la verdad es que esto ha sido un poco decepcionante después de lo que hicimos en Cercedilla hace un año, no ha estado mal, pero ha sido caro para lo que era. Flojito, flojito, sólo para nenazas y abuelas ? Lo de la abuela va en serio, nos hemos encontrado con una!
Como primera nota curiosa de este viaje vamos a hablar del tremendo número de iglesias que nos hemos encontrado. Por un lado empieza a entrarte la “paranoia” de que en este país son muy religosos y, aunque es cierto que el porcentaje de asistencia a la iglesia es enorme comparado con el de Europa (buscaré el enlace de referencia cuando vuelva a casa), no se puede perder de vista que Europa es bastante más homogénea en esta cuestión. Si pensamos en España por ejemplo, lo normal es que la gente sea católica con lo que en un pueblo pequeño sólo necesitan una iglesia. En Estados Unidos hay tantas opciones que en un pueblo pequeño tiene que haber muchas más para cubrir todas las opciones de los habitantes del pueblo.