Epopeya de Gilgamés, rey de Uruk de Sin-liqe-unninni / Anónimo / Varios
La Epopeya de Gilgames es un texto reconstruído a partir de multitud de tablillas y fragmentos encontrados en excavaciones realizadas en Iraq. Los primeros registros tienen algo así como 4000 años, si mi memoria no me falla. Hay tantas fuentes que heredan unas de otras o que se relacionan entre sí que resulta un tanto mareante seguir el baile de tablillas a las que se hace referencia.
En la extensa e imprescindible introducción que siempre acompaña a los libros de estas características, se presenta el contexto histórico y cultural en el que se desarrolló esta historia, su influencia en obras posteriores y en las culturas y sociedades en las que se transmitió. Al parecer todo apunta a que la mayor parte de los textos que se conservan son obras de escribas que practicaban o aprendían su oficio. Fascinante.
En cualquier caso el texto principal, el más completo y el que presenta especialmente esta obra es la versión de un escriba llamado Sin-liqe-unninni. Comprende once tablillas más una duodécima que no guarda un nexo narrativo con la historia que se va relatando en las otras once. La narración propiamente dicha tiene bastante lagunas, a pesar de esto se sigue bien y está en muchos casos completada con fragmentos de tablillas de origen distinto pero que encajan bien con el resto. Es interesante más allá del mero hecho cultural que representa leerlo, es una historia activa y emocionante, una historia conocida y sorprendente en el sentido de que podría haber sido escrita hace cien años, cincuenta o dos mil. Es un relato sobre la humanidad y su destino, sobre la aceptación de la muerte como fin. Me ha encantado.
Al final de esta edición hay una tercera parte que recoge otras versiones o fragmentos a parte del principal y que ilustra la extensión temporal y territorial del relato por Oriente Próximo, la región de los importantísmos ríos Tigris y Eúfrates.